El morbo como valor noticia

Cuando vi a Raquel Sánchez Silva en los TT de Twitter el jueves por la noche pensé que habría estado de invitada en El Hormiguero o similar. Desde luego, lo último que se me pasó por la cabeza fue que la causa fuera una tragedia como la pérdida de su marido, Mario Biondo, que había sido encontrado muerto a los 36 años. Es uno de esos asuntos que conmocionan -pese a no haber seguido ningún espacio conducido por la presentadora ni conocerla demasiado- y despiertan la curiosidad de la gente, también la mía. Cuando pasa algo que se escapa tanto a la lógica, es normal que se especule. Otra cosa es que lo hagan profesionales del periodismo de forma pública:

Me cuentan detalles de la muerte del marido de @raqsanchezsilva y me quedo impresionada. Por qué?
— Mábel Galaz (@mabelgalaz) 30 de mayo de 2013

Sobre estas líneas, un tuit de la periodista de El País Mábel Galaz, encargada habitualmente de cubrir las informaciones de la Casa Real y otros asuntos relacionados con la crónica social. Tras escribir esto, algunos tuiteros le solicitaron datos adicionales, a lo cual se limitó a responder que temía que no había sido un infarto (una de las primeras hipótesis barajadas, publicados incluso en medios como la web de la revista Diez Minutos) y luego zanjó con un "es un tema privado". ¿Cómo puedes escribir el tuit que reproduzco y luego decir que es un "asunto privado"? Solo se me ocurren dos opciones: o una intencionalidad de crear morbo o un "que sepáis que yo lo sé, aunque no os lo cuente". También me genera dudas ese "¿por qué?", ¿es un "¿por qué me quedé impresionada?" dirigido a quienes la leen?; ¿quizás un "¿por qué lo hizo?", dado lo que parece sugerir? No lo sé. Ni entro en si se debe informar de que fue suicidio (si lo fue, luego vamos a eso), pero desde luego, si no lo vas a contar, mejor te callas y no siembras dudas, pienso yo.

Al día siguiente, varios medios dieron por contrastado -aduciendo la confirmación de fuentes policiales- que se había tratado de un suicidio, lo mismo que dejaban entrever las palabras de Galaz. Hasta aquí todo bien, la Policía lo confirma -siempre según los medios que lo divulgaron- y se publica.

Desmentido de Raquel Sánchez Silva en Twitter el sábado.
A esto ha sumado hoy un comunicado donde se expresa en
la misma línea, hablando de "trágico y desafortunado accidente".

Lo peor llega cuando la propia Raquel Sánchez Silva desmiente, también en Twitter, que su pareja -un cámara de TV que actualmente trabajaba en MasterChef y al que conoció en Supervivientes-, con el que se había casado hace menos de un año, se quitara la vida. Leyéndola solo se me ocurren dos opciones: o realmente no lo fue o ella y los familiares de Biondo no querían que trascendiera, algo que no se ha respetado. En cualquiera de los dos casos, la actuación de los medios pasa a ser muy criticable. Si la Policía filtró que había sido un suicidio (me parece lo más probable, prefiero descartar una invención de los medios), la responsabilidad pasa a ellos, que no deberían facilitar el dato si sus allegados no deseaban que se conociese. Y si ni siquiera fue un suicidio como dice la presentadora, el cúmulo de despropósitos se multiplica.

En todo caso, un asunto trágico y extraño a todas luces. ¿Qué pensáis? (Del tratamiento por parte de los medios, no de los hechos en sí mismos).


*Actualización, julio 2013: Sánchez Silva ha sido muy criticada por mencionar un modelo de teléfono del que es imagen en el momento en que agradecía los mensajes de pésame recibidos por la muerte de su marido ("me han llegado gracias a él", dijo). Desde luego, una actitud de dudoso gusto... El morbo como valor noticia y el morbo como valor publicitario...