La sonrisa de un campeón

Marc Márquez es uno de esos pilotos que no ha podido celebrar la mayoría de sus éxitos con champán en el podio. ¿El motivo? Ser un campeón precoz -cumplió los 18 el pasado febrero-. Hoy, sin embargo, no había mucho que celebrar. Marc ha dicho adiós -salvo milagro de última hora- a un campeonato del mundo, el de Moto2, que llegó a acariciar con los dedos. Y lo ha hecho de la manera más amarga: tras sufrir una caída que le provocó magulladuras en todo el cuerpo y pérdida de visión en un ojo, cosa que le impidió correr hoy, y una semana después de lograr una remontada épica que le llevó al tercer escalón del podio tras haber salido en la última posición -más de 30 adelantamientos- por una sanción que muchos cuestionaron.

El piloto catalán Marc Márquez, de 18 años.

Pero esta mañana el joven piloto de Cervera (Lleida) no estaba triste. O, al menos, no lo aparentaba. Finalizada la carrera, hablaba para TVE con el ojo izquierdo cubierto y con esa sonrisa que nunca se borra de una cara que también se resiste a dejar atrás su tierno gesto infantil. Dijo que él haría su carrera en Valencia -la próxima parada del mundial- y reconoció que el título era ya casi imposible. Luego levantó el pulgar y lanzó un beso a la cámara. Sonriendo, insisto, en todo momento.

Marc es de esos deportistas a los que admiro. Y no por el talento que, en definitiva, tienen casi todos los que logran alcanzar la popularidad, sino porque a este suma humildad, sensatez y, por si esto fuera poco, optimismo. Empezó fatal su andadura en la categoría en la que debutaba esta año, con varias caídas consecutivas que le impidieron terminar las carreras. La historia no pintaba bien, pero fue mejorando y acostumbrándose a estar de nuevo entre los mejores hasta alcanzar el liderato. Al final, la suerte no estuvo de su lado y Bradl será el justo campeón. Pero el catalán, que ha decidido posponer su salto a Moto GP para seguir aprendiendo en Moto2 -otra prueba de esa sensatez de la que hablo-, tendrá una nueva oportunidad el año que viene. Y, pase lo que pase, seguro que seguirá manteniendo esa sonrisa de campeón.


*Actualización 10/11/2013: Dos años después del post anterior, Marc Márquez -que el año pasado sí había ganado finalmente en Moto2 tras el intento fallido que contaba aquí- acaba de terminar su primera temporada en MotoGP. Llegaba a la última carrera como líder, pero perseguido por un Jorge Lorenzo que tenía opciones muy reales de victoria. Hubo tensión hasta el final y yo estaba segura de que Marc acabaría sonriendo pasara lo que pasara. Obviamente, prefería que fuera con el mejor de los motivos y así fue. Márquez se ha convertido hoy, a los 20 años y en su primera participación en la categoría, en el campeón del mundo de MotoGP, en el más joven en lograrlo, en leyenda (como dice Marca, debajo). "Estaba muy nervioso aunque a vosotros os he dicho que no", ha dicho Márquez, pletórico.

El momento del triunfo, en mi tele.

La afición, celebrando la victoria.

Márquez, en una foto familiar de niño.
Fotogalería de El País.

Márquez, en lo más alto del podio.

Pol Espargaró, Marc Márquez y Maverick Viñales, campeones en sus respectivas categorías.