Muchas veces se dice eso de que la mente humana es muy complicada y de que nos cuesta entendernos entre nosotros. Me refiero al día a día, a situaciones cotidianas que, al final, no suelen tener siquiera especial relevancia. Pero luego hay casos como el de la niña asesinada hace casi una semana en Santiago, Asunta Basterra Porto, que van mucho más allá, en los que por más explicación (que no justificación, algo que ni se puede contemplar) que busques, se antoja completamente imposible hallarla.
Asunta Basterra, en el inicio del curso en el instituto Rosalía de Castro de Santiago donde estudiaba, muy pocos días antes de que acabasen con su vida. Foto: La Voz de Galicia. |
No tengo nada novedoso que decir sobre el tema, entre otras cosas porque ya se ha comentado de todo y porque no tengo ni idea ni de psicología ni de leyes. Pero, aun así, me apetece dedicar unas líneas a los pensamientos que me suscita un asunto que, como a todos -imagino- me ha impactado sobremanera.
Partiendo de que matar nunca está justificado, y menos a una niña, la cosa se complica (de cara a llegar al entendimiento con el que comenzaba) cuando nos cuentan que la autora ha sido su madre. No es el primer caso que vemos y parece claro que una persona con la mente enferma -que la de la Rosario Porto lo está es un extremo confirmado- puede hacer cualquier cosa por horroroso que parezca. Pero luego detienen al padre, ¿dos mentes enfermas y que coincide que son los padres de una misma niña como si la locura fuera contagiosa? Este es para mí, quizás, el punto más inquietante.
Partiendo de que matar nunca está justificado, y menos a una niña, la cosa se complica (de cara a llegar al entendimiento con el que comenzaba) cuando nos cuentan que la autora ha sido su madre. No es el primer caso que vemos y parece claro que una persona con la mente enferma -que la de la Rosario Porto lo está es un extremo confirmado- puede hacer cualquier cosa por horroroso que parezca. Pero luego detienen al padre, ¿dos mentes enfermas y que coincide que son los padres de una misma niña como si la locura fuera contagiosa? Este es para mí, quizás, el punto más inquietante.
El periodista Alfonso Basterra y la abogada Rosario Porto están acusados del homicidio de su hija de doce años. Foto: El Mundo. |
Si la detención de la madre era sorprendente, la del padre la superaba. Sorprendente incluso para la portavoz de la familia, que decía minutos antes que pondría la cabeza, los brazos y las piernas en el fuego por ellos. Por ellos, un exmatrimonio bien posicionado, socialmente activo, con estudios y demás. Datos poco relevantes, para mí, porque no creo que por tener menos estatus vayas a ser más sospechoso de querer hacer daño a tus hijos. Aunque admito que el dato sí contribuye a lo sorpresivo del asunto.
Y el suceso se sigue enrevesando cuando trasciende que el móvil podría ser económico, relacionado con una herencia. ¿Por dinero? ¿Matas a una niña supuestamente querida -una adopción es más compleja que tener descendencia de manera biológica y no digo que más deseada, pero nunca menos- por dinero? Dentro de lo incomprensible, me cabría un poco más en la cabeza que fuera por celos o en un arrebato. Pero hacerlo de forma premeditada y por una cuestión económica agrava más si cabe un homicidio que parecía que no podía tener tintes más oscuros. Si a esto le sumamos, ya dentro del terreno de la especulación (parte de lo anterior también lo es, sin nada demostrado ni juzgado...), las hipótesis de que la madre haya podido matar también a sus progenitores, que fallecieron de forma repentina y con pocos meses de diferencia, y de que quizás su hija podría haberlo descubierto (se habla del blog de la pequeña, donde escribió sobre un asesinato; solo suposiciones), todo se torna todavía más terrorífico.
Basterra y Porto contaron la experiencia de la adopción de la niña
en numerosos medios de comunicación. La Voz de Galicia recordaba
estos días algunas de sus declaraciones. Decían que aquello
era "para toda la vida".
Por otra parte, se pasó de que el pueblo de Santiago increpase a la prensa por preguntar al padre sobre su responsabilidad, a que los mismos ciudadanos le increpasen también a él en los registros de ayer. Podría decir que tenemos que aprender a ser cautos, a tener paciencia y no precipitarnos, pero también son cosas lógicas ante un hecho que sobrecoge como este. Es normal que ocurra, como lo es que la prensa se equivoque -su papel daba para un post aparte, pero no diría nada nuevo sobre la búsqueda del morbo exagerado y demás, ni sobre el consumo masivo de esos contenidos por parte del público- cuando trata de satisfacer una demanda de información que también me parece comprensible que exista ante un caso que nos impacta tanto.
Esto debe servir para hacer autocrítica y aprender (aunque esperando que no haya casos similares para ensayarlo) y las equivocaciones de medios y ciudadanos pueden llegar a entenderse, creo. El asesinato de una niña a manos de sus padres, si se confirma y sea cuál sea el móvil del crimen, no podrá comprenderse -ni enmendarse- nunca.
Esto debe servir para hacer autocrítica y aprender (aunque esperando que no haya casos similares para ensayarlo) y las equivocaciones de medios y ciudadanos pueden llegar a entenderse, creo. El asesinato de una niña a manos de sus padres, si se confirma y sea cuál sea el móvil del crimen, no podrá comprenderse -ni enmendarse- nunca.
Ha pasado mas de un año ¿ piensan lo mismo los amigos del matrimonio de estos presuntos ASESINOS ? , Ya no son tan buenos , y mucho menos inocentes son PRESUNTOS CULPABLES DE UN ASESINATO ATROZ . SI LOS CONDENAN : PEÑA MÁXIMA . NO IMPUNIDAD PORQUE SON GENTE DE NIVEL SOCIAL ALTO
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