jueves, 18 de octubre de 2012

Entrevista a la cineasta Nefise Özkal Lorentzen: "En mi lengua no hay 'él' y 'ella', Dios no tiene por qué ser hombre"

Nefise Özkal Lorentzen (Ankara, 1964) se considera turca, pero también noruega. Ha vivido en ambos países y en los dos ha encontrado, en ocasiones, incomprensión. "No me he sentido libre, como si estuviera presa", dice en el tráiler de su documental A balloon to Allah (Un globo para Alá), que se proyecta esta tarde (Teatro Principal de Santiago de Compostela, 20.00 horas) en el Festival Internacional de Cine Euroárabe Amal. Se trata de la segunda entrega de una trilogía sobre el Islam -comenzó con Gender me, estrenada en 2008-, donde busca reflejar un vínculo entre las tres religiones monoteístas -cristianismo, judaísmo e Islam-: la opresión a la mujer.


La cineasta noruega Nefise Özkal Lorentzen
Nefise Özkal Lorentzen presenta en Amal la segunda parte de su trilogía
sobre el Islam, basada en la relación entre este y la mujer. Foto: nrk.no

-¿Cuál es el origen de A ballon to Alah?
-Después del 11-S decidí que quería realizar una trilogía sobre el Islam y comencé a trabajar en la primera parte, Gender me, que trata del amor y la homosexualidad. En ella invertí mucho tiempo, pasaron casi cinco años desde que la inicié hasta que estuvo lista en 2008 y, a raíz del trabajo con los musulmanes homosexuales durante ese periodo, adquirí conocimientos acerca de las subculturas. Me di cuenta de que todavía hay conexiones entre el momento actual de los derechos de la mujer y los de los gays, porque todos luchamos contra los problemas que el patriarcado provoca en la sociedad. Por eso quise hacer una película referente al Islam y las mujeres, que es la que se va a ver en su festival. Ahora trabajo en el tercer capítulo, centrado en Islam y masculinidad, que estará preparada para emitirse en la televisión noruega en 2014.

-El punto de partida que da título a este trabajo es su idea cuando era niña de que podía comunicarse con Dios enviándole cartas a través de globos. ¿Cómo ha cambiado su pensamiento desde lo que le hubiera  querido decir entonces a lo que le trasmitiría ahora? 
-Cuando eres niño tienes muchos sueños y sientes que quieres transmitirlos pero que los adultos no te oyen o que no le dan importancia. Entonces pasas a un adulto superior, Alá, y a buscar la manera de transmitirle tus pensamientos, tus inquietudes y deseos. La cuestión es que en mi trabajo empleo animaciones, acoplo sueños, imaginación y hechos, todo junto. Utilizo las animaciones como una firma, de alguna manera, en mis documentales. En esta película vuelvo sobre la historia de mi abuela, que era sufí, usando mis historias y las suyas, las mezclo con mis sueños y experiencias de niña y actuales, de manera que aquellos pensamientos de mi infancia siguen teniendo cabida al lado de los que puedo tener hoy.


"La religión se basa en la igualdad y la solidaridad. 
Mi pregunta es por qué no llevamos eso a la práctica"

Documental A balloon to Allah de Nefise Özkal Lorentzen
A balloon to Allah muestra la diversidad de El Cairo, Estambul y Oslo. 

-¿Cuál es la idea principal que busca transmitir con este trabajo?
Vivimos un acontecimiento maravilloso en Oslo que lo ejemplifica muy bien: se vio la película en un museo, en un teatro al aire libre; no llovía ni hacía frío. Después teníamos preparado un gran globo verde, enorme, y pedimos al público que escribiera sus deseos, cualesquiera que fuesen, para colocarlos en aquel globo. Mucha gente plasmó los suyos y los mandó de ese modo a Alá. Si piensas sobre esas diferentes inquietudes que pueden tener las personas te das cuenta de que hay muchas desigualdades en nuestras vidas, contradicciones. La religión está basada en ser todos iguales, crear solidaridad, buenas personas, una moral adecuada. La principal pregunta que quiero plantear es el por qué no lo hacemos, qué problema hay para no poder desarrollarlo de esa manera.

Sin ir más lejos, yo no puedo referirme a Dios como “él”, porque en mi idioma no tenemos "él" y "ella", no se establece esa diferencia, de manera que cuando digo Alá, solo repito el nombre y casi utilizaría el it -pronombre neutro en inglés para animales y objetos inanimados-. El que no exista el género es una de las cosas que más valoro de la lengua turca, de ahí que no me guste cuando lo mencionan como "él": considero que no tiene por qué ser un hombre. 


Documental A balloon to Allah de Nefise Özkal Lorentzen
La protagonista conversa con la feminista egipcia Nawal El Saadawi,
o el escritor Gamal al-Banna, cuyas teorías son consideradas
por algunos como contradictorias con el Islam.
Imágenes: fritt-ord.no

-Dice que ha llegado a sentirse prisionera en los lugares donde ha residido. ¿Cree que la mayoría de las mujeres se han resignado a vivir de esa manera?
-Cuando yo digo que me siento en prisión no está exactamente relacionado con la religión, está más vinculado con el hecho de ser inmigrante, que es cuando lo vives de otro modo. En Turquía se puede criticar la religión, la moral y todo este tipo de cosas, pero cuando hago las mismas críticas en Europa se malinterpretan. Existe una islamofobia generalizada en Europa que conocemos, cuando criticas al Islam  se piensa que pretender deformarlo por querer actualizarlo a nuestro tiempo. Si lees el Corán, tienes que adaptarlo al momento presente y a su contexto, pero, por desgracia, en demasiados lugares del mundo se producen malentendidos, tiende a hacerse palabra por palabra, cuando el espíritu del libro sagrado nos da la posibilidad de reinterpretarlo de acuerdo con nuestras propias experiencias y circunstancias. 

Cuando eres inmigrante llevas encima una carga y un bagaje de tu primer país al que sumas uno nuevo del segundo; los combinas y ves como hay distintos escenarios y visiones de todas las cosas. En ese sentido yo pienso que es enriquecedor. En las políticas de nuestro tiempo hay muchas cosas que debemos cambiar juntos. Si critico el Islam quizás parece que estoy diciendo que es malo, y eso no es en absoluto lo que yo quiero transmitir, solo que es necesario realizar algunas modificaciones y amoldar las religiones a nuestro sistema. En lo que verdaderamente estoy muy interesada es en las diferencias entre la religión y la ley. La religión no es una ley, no nos tiene que conducir a implementarla. Esto es lo principal para mí.



"Mi punto de partida es que no hay enemigos, y que las historias 
que cuento pueden cambiar la idea que se tiene de quiénes son"

Rodaje del documental A balloon to Allah de Nefise Özkal Lorentzen
Diferentes momentos del rodaje de A ballon to Allah, que ha sido premiado
en varios festivales y se ha visto en países de los cinco continentes.

-Este es un proyecto muy personal en el que realiza las funciones de directora, guionista y también es la protagonista. ¿Consideró la opción de que otra persona asumiese este último rol?
-Sí que valoré la opción de escoger a una actriz, pero usándome a mí misma enseño mi realidad. Hay fragilidades en la historia con las que tienes que tener cuidado, debía tener en cuenta como directora si podía estar poniendo en riesgo a la persona elegida, proteger a mis personaje. Cuando yo soy la encargada del relato no tengo ese tipo de protección conmigo misma, yo decido lo que quiero hacer y el riesgo que estoy dispuesta asumir. Quería ser lo más honesta posible con mi público, eso fue lo que me llevó a usar mi propia experiencia y ser yo quien la contara. 

-¿Cree que este tipo de producciones pueden provocar una evolución en la mentalidad del espectador?
-Completamente. Creo en el poder la las historias para cambiar la actitud de la gente, para conectarla. Mi arte se basa en tratar de desmitificar al enemigo. Mi eslogan, mi punto de partida, es que no hay un enemigo, no lo es es Islam como tampoco los criminales o, qué sé yo, incluso las mafias. No empiezo por la palabra enemigo, porque la visión de que alguien lo es puede transformarse y a eso aspiramos.



"Me considero una activista del cine; quiero que mis películas
 tengan un valor por y para la gente"

Primera parte de la trilogía de Nefise Özkal Lorentzen
Gender me, la primera parte de la trilogía, se introduce en la problemática
de los gays musulmanes. Tras esta segunda parte acerca del Islam
y mujer, la entrega final versará sobre el hombre y esta religión.

-¿Cómo ha sido hasta ahora la reacción del público ante A ballon to Allah?
-He sido testigo de algunas increíbles, maravillosas. Algunas organizaciones de mujeres que no tenían ninguna relación conmigo, por ejemplo en Indonesia, lo han visto y lo han usado para organizar discusiones entre las mujeres, algo que resulta fundamental. Me considero una activista del cine, no hago películas para que vayan a la televisión o a los festivales, algo que también es fantástico e importante, lo que realmente me interesa es que vayan a la raíz, que tengan el valor de ser usadas por y para la gente.

A ballon to Allah se ha visto en 31 países alrededor del mundo, casi en todos los continentes a excepción de Latinoamérica y hemos recibido cinco premios que nos hacen estar muy orgullosos. Pero insisto en que mi interés principal es que llegue a las organizaciones de mujeres, que se use para la educación, que es lo prioritario.


"En la ficción puedes contar cualquier cosa por terrible que sea.
 El documental me parece más difícil". 

Serie Detective Klubben de Nefise Özkal Lorentzen
Nefise ha escrito una serie infantil para la televisión noruega que persigue
 la misma finalidad educativa que caracteriza a todos sus proyectos.

-Aunque se ha dedicado sobre todo a los documentales, también ha hecho alguna incursión en la ficción. ¿Dónde se siente más cómoda?
-He hecho nueve documentales y he escrito una única serie de televisión de ficción para niños. Estoy muy interesada en la inmigración y en mostrar su efecto positivo. Si cierras tus ojos y piensas, probablemente te vendrán a la cabeza veinte palabras problemáticas sobre esto. Pero tenemos que usar la creatividad como gancho, las experiencias que conocemos a lo largo de la historia de que la inmigración no es esa cosa mala que algunos piensan, eso es lo que trato de hacer ver a los más pequeños mediante los personajes que he creado para ese show.

Me encuentro muy cómoda en ambos, pero partiendo de que lo más importante para mí como cineasta es la ética, seguir mis leyes. En ese sentido tengo mis propias restricciones, cuando expones algo que es de verdad debes proteger a los personajes, asumir ciertas responsabilidades que siempre sigo a rajatabla como si se tratase de un contrato que he firmado conmigo misma. Sin embargo, cuando trabajas con ficción puedes hacer lo que quieras, no existen esos condicionantes, estás en disposición de grabar cosas terribles o inventar. No hay problema por enseñar cualquier cosa: lo hago, lo reflejo y no hay ningún por qué preocuparse. El documental retrata a gente real, opino que es más difícil.


-En Amal optan a nuevos reconocimientos al competir en la sección oficial. ¿Qué referencias tiene de este festival?
-Siento enormemente no poder acudir; me hubiera encantado estar, pero ha resultado imposible. He leído mucho sobre él y creo que es un festival maravilloso que hace una labor muy valiosa al crear plataformas de discusión sobre la inmigración y la relación entre las diferentes culturas. He trabajado en esto durante casi los últimos diez años y me parece una iniciativa increíble que ojalá continúe mucho tiempo.


Entrada relacionada: Entrevista a Hernán Belón: "El mundo árabe sigue siendo desconocido".

2 comentarios:

  1. Muy buena entrevista. Desde luego, es una cineasta valiente por tocar tabúes religiosos en un momento en el que el gobierno de Turquía ya no es laico, sino islamista moderado.

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  2. Muchas gracias, Daniel! Desde luego para mí fue una gran experiencia poder hablar con ella, me alegro que te haya gustado :)

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