Tonta, tonta, tonta eres…

Cuando un artista saca un disco –como cualquier otro profesional que presenta un trabajo dirigido a un público- le interesa, y mucho, ser noticia y lograr la mayor repercusión posible. No se puede negar que esto lo consiguió con creces la cantante Bebe en la reciente presentación de su último proyecto discográfico.

Quizás era esa trascendencia lo único que pretendía con su actitud. Pero pese a aquello de que “mejor que hablen de uno aunque sea mal”, no sé si, efectivamente, siempre compensa la forma. La extremeña, sin que se sepa muy bien el porqué, arremetió contra los medios de comunicación que cubrían el acto al que habían sido convocados de una manera difícilmente comprensible. Frases como “venga, que os follen bien a todos” o "si queréis os enseño las bragas luego, pero ahora paso" y otra serie de lindezas que, como mínimo, se puede decir que no venían al caso.

Nieves Rebolledo, Bebe, durante la polémica rueda de prensa.

Aparte del objetivo de llamar la atención, otros motivos podrían ser un mal concepto de la prensa tal vez motivado por alguna mala experiencia con los medios que desconozco, el estado en que se encontrase la propia cantante o qué sé yo. Pero da lo mismo. De ninguna de las maneras se puede justificar semejante comportamiento.

Para más inri, hizo caso omiso de la Ley Antitabaco al fumar dentro del local donde se desarrollaba la ¿rueda de prensa?, mientras que la calidad del nuevo tema que interpretó es, podríamos decir, opinable. Bebe se dio a conocer con una canción titulada Malo que se dirigía a un maltratador. Aunque no sea comparable, también le llamaba “tonto” a su interlocutor, un insulto que, a pesar de ser por distintos motivos, se le podría ahora aplicar perfectamente a ella visto lo visto. Y, a decir verdad, se quedaría demasiado corto.